Uno de los factores más importantes a la hora de cualquier entrenamiento o práctica deportiva, es el consumo de líquidos. Uno de los alimentos más importantes en nuestro cuerpo, es el agua. Así que, el mantener una cantidad específica en nuestro organismo, tiene una importancia extrema. La cantidad de esta en estado de reposo, es proporcional a la que eliminamos. Por tanto, al entrenar, el consumo debe ser más continuo, ya que al aumentar nuestra temperatura corporal con el ejercicio, el cuerpo intenta regularla a través del sudor.
El consumo de agua con electrolitos e hidratos de carbono, aseguran una mayor absorción de glucosa, ralentizando el umbral de fatiga. Por tanto, el tomar bebidas isotónicas, ricas en glucosa, sacarosa, dextrina y maltodextrina, nos ayudarán en las competiciones y entrenamientos de alto rendimiento.